En el Camino de Santiago

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domingo, 2 de agosto de 2015

¿Ser o estar?¿En cuál te ubicas?


Alguna vez te has preguntado qué tipo de persona te consideras? ¿Has escuchado tus respuestas?? ¿Sinceramente?  

Generalmente son de este tipo: Soy una persona sincera, soy responsable, soy amorosa … o soy tímida, soy perfeccionista, soy vanidosa… Más preciso cuando otros nos definen, puede ser algo como: Ella es simpática, ella es inteligente, ella es conversadora.... o ella es una persona egoísta, ella es habladora, ella es mandona...  y es, es, es... Pues, del concepto que expresamos tener de nosotros mismos y de los demás es de lo que hablaremos en este post.

Por si no lo sabes, el lenguaje que usamos nos ayuda a condicionar nuestro pensamiento y acciones. Igualmente, el pensamiento o imagen que tenemos de nosotros nos hace gestionar palabras sin cuidar muchas veces las repercusiones que estas nos puedan traer en nuestro desempeño diario; que luego se vuelve nuestra vida. Esta manera de gestionar nuestra percepción de nosotros, sin darnos cuenta, nos estanca en situaciones que a veces nos pueden mantener en disgusto y sin opciones perceptibles de movernos de ese estado.

Si tuviéramos la seguridad de contar todos con niveles altos de autoestima, y usar esta en nuestro favor y la del entorno, pues no serla necesario hacer esta observación. Sin embargo, a veces por distintos factores llevamos algunas desviaciones que se agravan y reafirman con la repetición de descripciones mal formuladas acerca de nosotros mismos y que van en nuestro perjuicio; este tipo de práctica o pensamiento nos impiden crecer o dejar crecer a los demás, en distintos niveles y espacios. 

Como dijo Ortega y Gasset "yo soy yo y mis circunstancias". En este sentido, podemos agregar que los seres humanos somos procesos, vamos con los aconteceres y nos moldeamos o hacemos por moldear nuestras situaciones y experiencias. No somos cosas u objetos estáticos que pase lo que pase se mantienen en la misma posición, tendencia y con las mismas características. Por lo tanto, al definirnos como algo que somos estamos asumiendo y dejando bien claro que llueva, truene o ventee así somos y es nuestro estado permanente; e inconscientemente cerramos posibilidades  a otra opción de comportamiento.

Estudios han señalado que pruebas psicométricas y de reacciones no son totalmente ciertas o inciertas ni positivas ni negativas, puesto que nuestro comportamiento se moldea de acuerdo a diversos factores y prioridades en momentos determinados, que pueden ir cambiando. Por lo que lo que es medible son las tendencias, y estas pueden variar al percatarnos y tomar ciertas acciones si fuese necesario.

Es muy útil diferenciar lo que es el ser y el estar.  Tu eres un ser humano y no dejarás de serlo a menos que mueras, un perro será un perro, una mesa es una mesa, sin embargo; lo que nos diferencia es que tenemos habilidades para entonar con el medio y fluir a conveniencia. En menos palabras, podemos decidir estar siendo de esta manera o de otra. 

Cuando hablamos de formas de ser del individuo, ahí es donde inicia la precauciòn del lenguaje. Una persona que se considera ser agresiva, implica que en cada acción que realice dejará ver que esta es su forma. Aquí es donde hacemos hincapié, el lenguaje limitativo que se genera por creencias tambien limitantes y muchas veces agravadas con frases matadoras que por supuesto genera comportamientos en consecuencia que le apoyan y nos hacen confirmar que tenemos razòn en nuestra definición. 

Cuando dices, soy una persona desorganizada. Que estás diciendo?? estas marcando una etiqueta que dice que todo lo que hagas serà regido por el desorden, cuando este tenga que ser tomado en consideración. Sin embargo, es cierto que te comportas de esa manera en tooooodos los aspectos de tu vida??? Siempre?? no lo creo, es ahi cuando nos llega la oportunidad de evaluar personalmente en cuales ocasiones y oportunidades tendemos a ser organizados y cuándo lo somos menos?? que situación nos impide mantener el orden o què nos impide sentirnos cómodos en el??, y nos damos cuenta en ese momento, que es una tendencia; por lo que es simplemente revertir, o hacer un cambio de practica_ una vez detectada. 

Esa capacidad de gestión del cambio, es la que nos va rediseñando una manera de vernos y de que nos vean, creamos nuevos hábitos; y por lo mismo, ya vamos cambiando nuestro concepto de nosotros mismos y asì los demás, cuando es el caso.

Asì mismo funciona cuando catalogamos a alguien, por ejemplo, de holgazán, ya no le damos espacios para pensar siquiera que podrida gestionar otro tipo de comportamiento en situaciones similares. "Trata a los demás como deseas que sean y verás que se van convirtiendo en ello poco a poco; para bien y para mal". 

Algo importante aquí es saber, comprender e interiorizar que tu no eres; tu estas siendo de tal o cual forma, gracias a situaciones, decisiones, ubicaciones... estos son puntos a evaluar siempre que necesites ubicar herramientas para lograr lo que deseas. Si ya estas en el estado deseado, Felicidades!, si no lo estas; entonces, revisa tus herramientas y maneras personales, esas creencias limitantes de que soy o no soy esto o lo otro y que te dicen que por esa razón no es posible lograr o ejecutar tal o cual cosa. Cambiando esta simple manera de vernos y elegir el comportamiento, palabra y situaciones que nos lleven donde queremos, es fundamental para gestionar cada momento de nuestra vida y que estos no nos gestionen a nosotros.  

Aquí sí podemos decir que nosotros, el conjunto de nuestra esencia, somos más que cualquier característica en particular o tendencia adquirida, recordemos que las situaciones no siempre son como son, son como las vemos; en la mayoría de las ocasiones. En nosotros está el observar y sacar partido de nuestro estado y entorno. En nuestro poder también está el eliminar de nuestro lenguaje el siempre y el nunca, si estos nos limitan o nos impiden pensar de manera flexible u objetiva. 

Usar un lenguaje que nos persuada para lograr lo que deseamos, estar despiertos y dispuest@s a gestionar los medios y actuaciones necesarias está a nuestro alcance. ¡¡Somos procesos, no cosas!!  Lo que es hoy, no tiene que ser mañana. Hagamos uso permanente de un estado de justicia, flexibilidad, positividad y proactividad en nuestra manera de vernos y ver a los demás. Verás lo a gusto se siente el fluir y te sorprenderás de los resultados.

Entonces ahora, eres o estas siendo?